¡Conozca a Dene Roseburr-Olotu, nuestra nueva directora de Inclusión y Diversidad!

Dene se unió a ONE Gas, empresa matriz de Texas Gas Service, el pasado agosto. Tiene 10 años de experiencia en el desarrollo y facilitación de iniciativas de I+D, un área en la que se destaca. En el último tiempo, se desempeñó como directora de I+D de la Universidad de Central Oklahoma. Comenzó su carrera como ingeniera industrial y anteriormente trabajó en Amazon, en la supervisión del Departamento de Devoluciones del cliente.

Dene se sintió atraída por una carrera en I+D ya que representaba una oportunidad para ayudar a las personas a expandir sus perspectivas.

"Considero que el sector de I+D es todo un recorrido: puede resultar algo incómodo al inicio, pero es verdaderamente transformador. Me gusta poder ser parte de ese progreso con las personas", comentó.

Conozca a Dene y descubra qué opina sobre cómo el área I+D ayuda a crear un sentido de pertenencia tanto en nuestra fuerza laboral como en las comunidades en las que operamos.

¿Qué es lo que más la emociona de este puesto?

Además de tener la oportunidad de trabajar en lo que amo, lo que más me emociona es el potencial del momento. La empresa ha tomado una serie de medidas muy puntuales en el desarrollo de su estrategia de inclusión y diversidad, y ahora es el momento de ponerla en práctica. Me emociona ver cómo esa implementación hará avanzar a la empresa hacia sus objetivos de I+D.

La I+D representa uno de nuestros valores fundamentales. ¿Por qué para Texas Gas Service es tan importante centrarse en este tema?

Tras décadas de investigación, se ha demostrado que las organizaciones que adoptan una estrategia de I+D son más innovadoras, tienen una mayor productividad y superan a sus pares menos inclusivos. Más allá del caso de negocios que se puede argumentar para una estrategia de I+D, abrazar la inclusión le permite a la empresa crear un espacio genuino de pertenencia y comunidad para todos.

Durante su carrera, ¿qué ha aprendido acerca de la I+D?

Las personas siempre me escucharán comentar que el aspecto central de toda estrategia de I+D es la consideración. Mostrar consideración por los demás se traduce tanto al respeto como en buena voluntad. Abre la puerta no solo al diálogo, sino también a la toma de decisiones inclusivas. Un ejemplo que uso a menudo para ilustrar esta estrategia son las diferencias en las decisiones de alimentación. Si tengo en cuenta que mi colega es vegano y sugiero opciones de restaurantes que se ajusten a su estilo de vida, estoy demostrando empatía y consideración con mi colega. Para mí, esto es inclusión: la toma de decisiones que incluye la consideración.

¿Qué impacto pueden tener nuestras iniciativas de I+D en nuestros clientes y en las comunidades en las que operamos?

Sin duda, nuestras iniciativas de I+D pueden generar un impacto positivo en todos y cada uno de nuestros grupos de interés. El compromiso intencional con la I+D significa mostrar respeto mutuo y aceptar y reconocer las diferencias. Cuando lo ponemos en práctica, podemos crear espacios en los que todos tengan un sentido de pertenencia y esto, en última instancia, da como resultado un lugar más seguro para trabajar y convivir.

En nuestra vida cotidiana, ¿cómo podemos practicar la inclusividad cada uno de nosotros?

Todos los días nos encontramos con una persona que tiene una experiencia de vida diferente a la nuestra. Nuestras propias experiencias de vida (cómo y dónde crecimos, qué priorizamos, etc.) afectan la forma en que elegimos participar en el mundo que nos rodea. El sector de I+D alienta a cada uno de nosotros a reconocer cómo esas diferentes experiencias de vida nos ayudan a establecer relaciones con nuestros colegas, clientes y la comunidad en la que trabajamos. La I+D es parte integral de los espacios que habitamos.

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